La inspiración y concepción del arte y la vida misma de la emblemática coreógrafa y bailarina Yvonne Von Mollendorff son la búsqueda que motivó "Mi Vida La Danza", documental del cineasta Mario Pozzi-Escot, que se estrenará en el Jazz Zone de Miraflores este domingo 20 de octubre. Informes al +51 928 749 766 vía WhatsApp.
En el documental "Mi Vida La Danza", mencionas que la danza ha sido tu refugio y forma de expresión más pura. ¿Cómo ha moldeado la danza tu visión de la vida y el mundo?
En cierta manera todo se mueve. El mundo es danza, grande o pequeña, lenta o veloz. Yo soy solo una parte minúscula de este mundo en movimiento.
El escenario es como un enorme lienzo, pero en tres dimensiones. Donde se complica todo, es en la percepción del tiempo: es un asunto físico, directo, el tiempo literalmente desaparece debajo de tus pies. Estando consciente del momento, habiéndolo ensayado durante meses... Algo tan esencial como la vida y la muerte en simultáneo.
Y es ese momento que da una suerte de certeza y un cierto sentido a la vida, que en sí, probablemente, no tiene.
¿Qué significa para ti el arte de la danza en su esencia? ¿Lo ves como un medio de conexión entre la vida interior y exterior?
De todas maneras. Supongo que todo artista es motivado por su vida interior y la vida exterior que contiene la forma. Por eso digo: ¿quieres saber quién es Yvonne? Anda a verla en el escenario. Uno de mis bailarines me dijo una vez que lo que le gustaba al trabajar conmigo era la manera como lo dejaba entrar en mi órbita.
El documental refleja tu visión transformadora sobre la danza. ¿Qué aspectos de tu vida y carrera sientes que fueron mejor capturados en la película?
Durante la filmación he descubierto que la vida es larga – dependiendo de qué lado del tiempo uno se ubica. Pero también admito que me da un cierto pudor hablar de mi misma, no creo tener respuestas claras, no puedo tener una visión panorámica de mi vida. Quizá esa es una tarea para otros.
La danza es un lenguaje universal que expresa emociones, luchas y sueños. ¿Cómo crees que la danza permite comunicar lo que las palabras no pueden?
¿Cómo saber qué es lo que el espectador percibe?, es un perfecto misterio, pues todo depende de la disponibilidad del otro. El lenguaje de la danza es sencillo en el ámbito emotivo y sensorial, pero, si lo mentalizas, da lugar a muchas interpretaciones. Pero ambiguas también son las palabras pues todas tienen múltiples connotaciones y definiciones … quizá lo único universalmente inequívoco son las fórmulas matemáticas.
Ahora, la danza existe en todos lados - se danza en fiestas, en discotecas, en plazas- , y por muchas razones – para buscar pareja, para preparar una batalla, para celebrar eventos sociales, por el mero placer de compartir y por lo tanto comunicar.
¿Qué impacto ha tenido en ti ver tu trayectoria reflejada en un documental, y cómo te ha hecho reflexionar sobre tu legado en la danza y el arte?
Legado es una palabra muy grande y mi trayectoria sigue andando. Yo solo hago lo que reconozco como mi verdad. Lo cierto es también que me encanta usar otros formatos, dibujo, textos, música, solo que no creo tener suficiente tiempo para explorar a fondo todos estos terrenos. En todo caso, compartir es hermoso y se establece un vínculo estrecho entre las personas que trabajan conmigo. Espero, sinceramente, dejarles algo y quizá tocarlos en su esencia. En algún lugar nos encontramos y nos reconocemos.
¿Cómo concibes el lenguaje de la danza? ¿De qué manera crees que los movimientos, gestos y expresiones pueden comunicar ideas y emociones de manera única, distinta a otros lenguajes artísticos?
Componer una coreografía es bastante complejo porque implica involucrarte en muchos campos, supone una mirada muy amplia. Tienes que crear en todas las direcciones a la vez. Lo vivido – imágenes vistas, situaciones experimentadas, textos leídos – son piezas que forman un rompecabezas que durante el proceso creativo adquiere forma, se va ordenando. Básicamente es poner orden en el caos.
El coreógrafo no tiene un texto o un guion en que basarse y a partir del cual puede confeccionar la puesta en escena. Nuestro soporte es el espacio vacío y el tiempo en su forma genérica o física (que viene ser el cuerpo en movimiento). Quizá es mas parecido a la poesía, a ese algo cuyo soporte son transparencias e improbabilidades.
¿Cómo ves la función del arte hoy en día para enfrentar las tensiones y los retos de la sociedad?
Me temo que el arte no salva a nadie, pero de seguro el arte puede socorrer a quién busca aliento… Yo todavía no me libero de la ilusión que pueda haber un mundo mejor.
El documental invita al público a conocer tu mundo interior. ¿Cuál es el mensaje que quieres comunicar sobre el valor y el significado del arte para la vida?
De niño, cualquiera ha encontrado la felicidad cantando, bailando, pintando, la libertad de gozar, el goce de ser libre de juicio. Es tan sencillo … Cada uno escoge.
¿Cómo ha evolucionado tu relación con la danza a lo largo de los años? ¿Qué te motiva a seguir creando y explorando nuevas formas de expresión?
El asunto de la creatividad para mi es como un motor: canaliza mi energía vital y la convierto en combustible. A lo largo de mi vida he recogido gran cantidad de impresiones, experiencias, emociones e ideas mentales y todo este bagaje busca ser transformado. Tal es así que me gusta llamar mi trabajo transformance …
¿Qué sentiste al trabajar en "Mi Vida La Danza" y ver plasmada en la pantalla tu travesía artística? ¿Cómo fue el proceso de colaborar con el director para contar tu historia?
Mario, gracias, fue una experiencia inesperada … y admito haberme sentido como resbalando por un larguísimo tobogán.
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